Por: Alejandro Silva Espejo
Hay varias teorías populares sobre dónde se origina la festividad del amor, y la línea de pensamiento más frecuente se relaciona con el festival romano antiguo, Lupercalia (alrededor del 278 d. C.). Imagina un poco menos de regalos secretos y un cortejo un poco más primitivo en forma de sacrificios de animales y pactos de sangre.
Pero no fue sino hasta el siglo XVIII que las tradiciones reconocibles del Día de San Valentín comenzaron a hacerse populares entre los ciudadanos de todas las clases. Intercambiar pequeñas muestras de afecto y notas manuscritas, pronto se convirtió en la norma entre amigos y seres queridos cada 14 de febrero. A principios del siglo XIX, los intercambios de obsequios habían sido una tradición social durante la mayor parte de un siglo; la compañía de chocolates Cadbury fue la primera en elaborar productos del Día de San Valentín producidos en masa, y lanzó la primera caja de chocolates en forma de corazón para el Día de San Valentín en 1868.
Día de San Valentín en el mundo moderno
Los datos de 2020 estiman que, en promedio, gastamos $500 por persona en el Día de San Valentín, y esta cifra es cada vez mayor. Es posible que una simple caja de Cadbury ya no sea suficiente para satisfacer a un amante en el gran día, incluso si llega en una caja con forma de corazón. Pero la razón principal de este gasto excesivo es la multitud de obsequios y experiencias alternativas impulsadas por las marcas cada febrero.
¿Debería mi marca realizar una campaña de San Valentín?
Si se pregunta si su marca es la adecuada para ejecutar una campaña para el Día de San Valentín, es muy probable que ya tenga la respuesta. Los especialistas en marketing a menudo olvidan que las vacaciones de temporada y los días de concientización son algunos de los más ruidosos del calendario. Estos son períodos en los que a todas las marcas les encanta gritar sobre sus ofertas por tiempo limitado y lanzamientos de nuevos productos, lo que hace que sea extremadamente difícil que su público objetivo escuche su mensaje. Como muestran los estudios de casos anteriores, una gran campaña del Día de San Valentín no es una ocurrencia tardía, debe ser una pieza creativa considerada estratégicamente, que requiere tiempo e inversión para aterrizar.
Si ha perdido el tren este año, ¿por qué no seleccionar un período más tranquilo en su calendario de marketing para crear sus propias vacaciones de marca? De esta manera, puede crear una campaña memorable con absoluta alineación con sus ofertas y asegurarse de que su voz se escuche por encima de la competencia.
El Día de San Valentín es una gran oportunidad para mostrar amor y agradecimiento a la gente que apoya tu negocio y también puede resultar beneficioso para tus ingresos. En 2019, los compradores gastaron por San Valentín 20 700 millones de dólares, sólo en Estados Unidos, y cada una de las personas que lo celebró, gastó una media de 161,96 dólares en regalos para sus seres queridos.
En torno al Día de San Valentín es importante ser un vendedor empático; estas fiestas hacen que algunas personas se sientan solas o tristes, pero puedes conectar con tu público siendo considerado y levantándoles el ánimo. En un día en el que mucha gente quiere recibir alguna muestra de afecto, envía a tus clientes una postal de San Valentín. No es necesario que contenga ninguna noción romántica exagerada; en su lugar, simplemente le puedes dar las gracias por apoyar tu negocio.
