Por: Carime Kuri Fierros
El Dr. Ryke Geerd Hamer, médico alemán, desarrolló una serie de teorías conocidas como “Nueva Medicina Germánica” (NMG). Estas teorías se basan en la idea de que todas las enfermedades, incluyendo el cáncer, son causadas por conflictos emocionales no resueltos. A continuación, te presento algunos puntos clave de sus teorías.
Ley del Fierro de Cáncer: Hamer decía que cada cáncer o enfermedad equivalente comienza con un “DHS” (Síndrome de Dirk Hamer), un choque conflictivo extremadamente agudo, dramático que se experimenta o vive en soledad de manera aislada.
Fases básicas de las enfermedades: Hamer propuso que todas las enfermedades tienen dos fases: una fase de conflicto activo conocida como simpaticotonía, y una fase de curación llamada vagotonía, siempre y cuando se resuelva el conflicto.
Sistema ontogénico de tumores y enfermedades equivalentes al cáncer: Hamer sostuvo que la localización del cáncer en el cuerpo depende del tipo de conflicto emocional experimentado, basándose en el desarrollo embrionario de los órganos.
El sistema ontogénico de microbios: según esta teoría, los microbios como bacterias, hongos y virus son controlados por el cerebro y desempeñan un papel en la fase de curación de las enfermedades.
Quinta Ley Biológica: Hamer afirmó que las llamadas “enfermedades” son programas especiales de la naturaleza con sentido biológico, diseñados para ayudar a los organismos a manejar situaciones inesperadas de estrés.
Las teorías de Hamer han sido ampliamente criticadas y rechazadas por la comunidad médica y científica debido a la falta de evidencia empírica y a los riesgos potenciales que representan para los pacientes que rechazan el tratamiento médico convencional basados en estas ideas. Inclusive Hamer fue despojado de su licencia médica.
Pero no se puede anular el trabajo del Dr. Hamer cuando su investigación más profunda la inicia a partir de la muerte inesperada a corta edad de su hijo, al año de este lamentable suceso, él y su esposa desarrollan un cáncer. El Dr. Hamer lo presenta en el testículo izquierdo y su esposa en el seno izquierdo, a partir de estos diagnósticos, él intuye que no es una casualidad ni es una mala jugada del destino; es así que se sumerge en pilas de expedientes clínicos de personas que tienen el mismo cáncer que él y encuentra el factor emocional que lo genera, “la pérdida de un hijo” en un 95% y el 5% más, lo desarrollan aquellos que sufren la pérdida de lo que consideran un “hijo simbólico”, como puede ser la pérdida de un familiar amado como un hijo, una mascota e incluso su empresa considerada como tal.
Hamer sostiene que los diferentes tipos de conflictos emocionales están asociados con cáncer en distintas partes del cuerpo. Por ejemplo: un conflicto de pérdida podría afectar los huesos (causando leucemia o cáncer de hueso), mientras que un conflicto de separación podría impactar en la piel, derivándolo a un cáncer de piel. Hamer dejó un gran legado.