Por: Carime Kuri Fierros
“Un Cuento de Navidad” escrito por el británico Charles Dickens, tiene como personaje principal a Ebenezer Scrooge, un anciano amargado que profesa la avaricia en todas sus formas, despreciando la Navidad y todo aquello que representa; así mismo, muestra su enojo contra aquel que la espera y la festeja. El Sr. Ebenezer Scrooge es visitado durante la noche víspera de la Navidad por los espíritus de las Navidades pasadas, presentes y futuras, que lo llevan a recorrer lugares y personas que le muestran su actitud egoísta y ruin y la forma en que afecta a las personas a su alrededor. Conforme recibe a cada uno de los espíritus y realizan las visitas sobrenaturales y reflexivas de su vida, el corazón de Ebenezer Scrooge se va ablandando hasta despertar al amanecer, siendo un hombre generoso y amable.
La historia de este personaje es un fuerte recordatorio de la importancia de tener presente y activa la compasión, la empatía y la generosidad en la celebración de la Navidad y poder aplicarlas en la vida diaria en general.
“El Abeto” es un cuento escrito por Hans Christian Andersen, autor danés. Esta historia inicia con la vida de un pequeño Abeto que anhela crecer y experimentar todo lo que el mundo ofrece. Mientras éste crece, va presenciando diferentes eventos como el paso de las estaciones y las celebraciones que se llevan a cabo, pero él siempre deseando ser el más alto y el más hermoso.
El cuento nos lleva a explorar temas tan importantes como la insatisfacción, la envidia, vivir constantemente en el futuro y la inconformidad. Llega el momento en que el Abeto es talado, mezclado con muchos abetos más, es vendido y llevado a una casa donde él cree que será halagado constantemente por su altura y su belleza convirtiéndose en el centro de atención durante la noche de Navidad, pero es adornado con luces, cartas y figuras, él se siente opacado por el brillo de todo lo que lleva encima y su frustración y su orgullo crecen hasta conmoverse de sí mismo, reflexionando sobre la importancia de apreciar el presente, arrepintiéndose de su insatisfacción y del tiempo perdido tratando de ser algo que le parecía ser mejor.
“El Príncipe Feliz”, escrito por Oscar Wilde, es un cuento de Navidad que lleva consigo un profundo mensaje reflexivo. La historia se centra en una estatua dorada de un príncipe que, desde su pedestal, observa la pobreza y el sufrimiento que ahí existen. A pesar de su belleza y riqueza, el Príncipe decide ayudar dando eso mismo que tiene, su belleza y su riqueza. Este acto de generosidad y compasión nos lleva a una reflexión profunda sobre el verdadero valor de la riqueza, y la importancia de ayudar a los demás.
El Príncipe feliz nos invita a contemplar la empatía, el sacrificio y el acto de compartir en la Navidad, de tal forma que podamos aplicarlos durante todo el año, nos enseña que la verdadera riqueza se encuentra en el amor.