Por Alejandra Reverendo
Todo sobre el proceso creativo requiere estar en un cierto estado mental, sentirse motivado, concentrado y en la zona para producir el mejor trabajo. Es particularmente frustrante cuando estás avanzando, tratando de ser tu yo más brillante e imaginativo y de repente, algo se siente mal, tienes problemas para pensar en nuevas ideas.
Cuando toda tu carrera se basa en ser imaginativo, tener un bloqueo creativo es lo último que necesitas. Puedes hacerlo bien al comienzo de un proyecto para prepararte, pero eso no significa que no te encontrarás con algún tipo de bloqueo.
Muchos de nosotros pasamos nuestros días metidos en nuestras computadoras y construimos la mayor parte de nuestro trabajo como diseñadores en la era digital; sin embargo, tal vez lo que debe hacer es volver a lo básico. Toma un descanso de tu escritorio y sal a caminar con tu cuaderno; cuando pasas de una pantalla brillante de computadora a un lápiz y papel, es posible que te sorprendan las ideas que comienzan a pasar por tu mente. Dibujar con una pluma o lápiz real en papel real cambiará la forma en que ves las cosas y te dará una perspectiva completamente nueva.
Recuerda que no puedes forzar la creatividad. Como dice el diseñador, artista y autor Adam J. Kurtz “Obligarnos a ser creativos es una pérdida de tiempo, no es una habilidad que tengas o no tengas, sino más bien una colección de tareas emocionales y mentales que no siempre se combinan”. Está bien tomar un descanso y volver más tarde, después de que tu cerebro haya descansado, es posible que te sorprenda lo que sucede después de un pequeño descanso; a menos que haya una emergencia, prefiero simplemente irme. Haga otra cosa y deje que los pensamientos lleguen a su mente antes de ponerlos en acción.
Encuentra nuevas fuentes de inspiración. La inspiración se puede encontrar en lugares inesperados. Mirar el trabajo de otros artistas puede ser muy motivador; sumergirte en algo nuevo, especialmente si su trabajo es diferente al que estás acostumbrado, puede generar una gran cantidad de nuevas ideas. Recuerda, la inspiración puede provenir de todas partes, no sólo de las artes visuales. En caso de duda, sumérgete en una experiencia cultural fuera del trabajo: ve una película, asiste a una obra de teatro o visita un museo; a veces sólo necesitas hacer algo para despejar tu mente, ya sea limpiar la casa o salir a correr.
No tengas miedo de fallar. ¿Estás posponiendo hacer algo porque tienes miedo de que no sea lo suficientemente bueno? Es hora de dejar a un lado tus miedos y seguir adelante. Correr riesgos te ayudará a perfeccionar tus habilidades y, quién sabe, podrías terminar haciendo un trabajo que nunca imaginaste. También tenemos miedo de caernos mientras trabajamos en un proyecto importante; como resultado, nos apegamos a lo que sabemos y tenemos miedo de expandirnos.
Una de las razones más comunes del bloqueo creativo es el miedo a la imperfección. Muchos creativos se consideran perfeccionistas, lo que puede impedirles seguir ideas o completar proyectos; sin embargo, la realidad es que la única forma de «perfeccionar» verdaderamente tu oficio es creando. Para impulsar la mentalidad perfeccionista, los artistas y diseñadores deben alentarse mutuamente y recordar que el crecimiento es lo más cercano a la perfección. No es el fin del mundo empezar de nuevo cuando una idea llega a un callejón sin salida, sólo significa un nuevo comienzo.
Mientras atraviesas cualquier período de bloqueo creativo, recuerda darte espacio y tiempo para crear como artista y diseñador. Reconoce las causas de tu bloqueo creativo y haz todo lo posible para salir adelante. La creatividad no se puede forzar, así que recuerda mirar a tu alrededor en busca de nuevas fuentes de creatividad y permítete la capacidad de fallar para tener éxito.