Por: Rosa María Ortiz Prado
¿Afecta el envejecimiento psicológicamente de la misma manera a la mujer y al hombre?
El envejecimiento puede tener diferentes efectos psicológicos en mujeres y hombres; en parte, debido a diferencias biológicas, sociales y culturales, y las repercusiones se presentan con algunas variantes.
Aspectos físicos. Para muchas personas, los cambios físicos asociados con el envejecimiento, como la disminución de la energía, la aparición de enfermedades crónicas y la pérdida de agilidad, pueden afectar su autoestima y provocar ansiedad y depresión. Estos cambios pueden ser más pronunciados en las mujeres debido a la menopausia y a las presiones culturales de mantener una apariencia juvenil.
Roles de género. En muchas culturas, se espera que las mujeres desempeñen roles de cuidado y de sostén emocional de la familia, lo que puede intensificarse con la edad a medida que pueden tener que asumir responsabilidades adicionales de cuidado de los padres ancianos. Por otro lado, los hombres pueden experimentar una pérdida de identidad relacionada con los roles tradicionales de proveedor y protector a medida que envejecen, lo que puede ser especialmente desafiante en sociedades donde se valora la juventud y la productividad.
Redes sociales y aislamiento. Tomando en cuenta la importancia actual que damos a las redes sociales, a medida que las personas envejecen, es común que pierdan amigos y seres queridos, lo que puede llevar a sentimientos de soledad y aislamiento. Las mujeres suelen tener redes sociales más sólidas y desarrollar conexiones emocionales más profundas que los hombres, lo que puede ser un factor protector contra la depresión en la vejez.
Autoconcepto y autoestima. Tanto mujeres como hombres pueden experimentar cambios en su autoconcepto y la autoestima a medida que envejecen. Las mujeres pueden enfrentar desafíos relacionados con la invisibilidad social y sexual, y la discriminación por la edad, mientras que los hombres pueden experimentar dificultades para adaptarse a una disminución en su capacidad física o cognitiva.
Resiliencia y adaptación. A pesar de los desafíos, muchas mujeres y hombres mayores muestran una notable resiliencia y capacidad de adaptación frente a los cambios asociados con el envejecimiento. La actitud positiva, el apoyo social y las estrategias de afrontamiento efectivas pueden ayudar a mitigar los efectos negativos del envejecimiento en la salud mental y el bienestar emocional.
En conclusión, el envejecimiento puede afectar de manera única a mujeres y hombres desde el punto de vista psicológico, y es importante considerar cómo los factores biológicos, sociales y culturales interactúan para influir en la experiencia de envejecer en cada género. Fomentar una mayor conciencia y comprensión de estos aspectos puede contribuir a promover el bienestar psicológico y emocional en la vejez. Nuestro país tiene un porcentaje muy alto de personas en la tercera edad, población activamente votante que, en su mayoría, no cuenta con una pensión laboral, y que engrosa las filas de las enfermedades crónico-degenerativas, sumando Alzheimer, Demencia Senil y Párkinson en el terreno neuro orgánico, con cuadros de depresión, ansiedad y trastornos asociados con la soledad, el duelo y el abandono. Es muy importante crear una cultura de la tercera edad, protejamos a quien nos dio la vida!
Dra. en Psicología Clínica y Maestra en Neurociencias: Rosa María Ortiz Prado