– ¿Alguna vez han pensado que el Derecho es un río que no se detiene? Nace en la sierra de nuestros principios, serpentea por cañadas de casos imposibles y desemboca, imparable, en la marea de la vida cotidiana. –
Colegas:
No estamos en este oficio por casualidad.
La abogacía—como ustedes bien saben—no es un conjunto de códigos y normas que aprendemos de memoria. Es una herramienta de transformación social. Es un puente entre el conflicto y la solución, entre el miedo y la certeza, entre lo incierto y lo justo. Todos los días desde nuestros despachos, ayudamos a que niñas y niños tengan un correcto desarrollo psicoemocional, a que dos personas que se amaron comprendan que no serán pareja, pero que siempre protegerán la familia que construyeron que, si bien es cierto que al morir nada nos llevamos, debemos ser responsables de nuestras acciones y heredar paz. A emprender con mayor seguridad al formalizar una sociedad, a mujeres a decir ya no más y a formalizar sus sueños, a trabajadores a conocer sus derechos, a comunidades a defender lo que es suyo.
Eso y más es lo que hacemos, no siempre se celebra públicamente. Pero está ahí. Y sostiene la vida cotidiana de Oaxaca.
En medio de tanta urgencia, a veces lo olvidamos.
Por eso hoy te invito a volver a mirar lo que representas.
No sólo eres abogada o abogado: eres generador(a) de certeza jurídica.
Y eso, vale oro.
Desde el Corporativo Velásquez Chagoya creemos en una abogacía moderna, ética, preventiva y humana. En la que no sólo se resuelven problemas, sino se anticipan. En la que el cliente no sólo firma… entiende lo que firma. En la que la familia, la empresa o la comunidad pueden dormir tranquilos porque hay alguien que les respalda con conocimiento y claridad.
Hoy más que nunca, Oaxaca necesita abogadas y abogados que inspiren confianza, que no se pierdan en tecnicismos, que comuniquen bien, que sepan decir: “Aquí estoy. Este asunto tiene solución. Y sí, se puede hacer bien.”
Ramón Velásquez Chagoya
Director General
Corporativo Velásquez Chagoya
