El mercado de Tlacolula es una de las expresiones de color y sabor más grandes de nuestro Estado. Concurrido no sólo por los habitantes de los pueblos vecinos; las calles inundadas de mercancías han ganado fama entre los visitantes nacionales y extranjeros que, desde muy temprano, se maravillan con las muestras culturales que aquí se dan.
Es indispensable llevar ganas de comer y muchas, pues el desayuno no es ligero, pan con chocolate atole, carnes asadas, una empanada o consomé con barbacoa, son algunos de los imperdibles. Para disfrutar de unos ricos tacos de barbacoa nos sentamos con doña Margarita Ramos quién vende este manjar desde hace cuarenta años, su madre y su abuela se dedicaron a lo mismo. En el puesto, Margarita, rodeada de sus anafres y cazuelas, sirve un consomé sustancioso que puedes adornar con cilantro, col, salsa verde, guacamole, rabanitos y limón; también tiene tacos de sesos, sangrita, ojo y lengua. Por si fuera poco, en la mesa hay mezcal de la región, también hay chocolate con agua o leche, chocolate atole y aguas frescas. La experiencia fue deliciosa así que, si visitas Tlacolula, no dudes en echarte un taco en el puesto “Margarita” al interior del mercado donde ella y su familia te atenderán alegremente.
Otro pasillo del mercado lo ocupan los panes, uno de los más vendidos y famosos es el pan de cazuela, este pan es suave y va relleno de chocolate y pasas con un toque de canela, se cocina en horno de leña utilizando como molde, latas de sardina. Un gran número de familias en Tlacolula se dedican a la panificación, por eso no es extraño encontrar docenas de puestos y panaderías con miles de panes apilados.
Todas estas delicias y más, puedes disfrutar los domingos desde muy temprano en las calles y el mercado de Tlacolula de Matamoros, localizada a 35 minutos aproximadamente de la ciudad de Oaxaca.