El rosa de la Península

Por: Romina Silva Espejo y Roberto Villagrán Torres

Los humedales son ecosistemas que presentan características de los ambientes acuáticos y terrestres; sus suelos pueden estar cubiertos por agua estacional o permanentemente. Además, algunos de estos, crean una conexión entre el mar y la tierra, propiciando las condiciones necesarias para que una gran diversidad de organismos complete su ciclo de vida; este es el caso de los humedales costeros como las rías, manglares y ciénegas.

La Península de Yucatán se caracteriza por la existencia de importantes humedales costeros los cuales, a diferencia de otros, se pintan de un color rosa brillante gracias a la presencia de Phoenicopterus ruber o mejor conocido como flamenco rosa del Caribe. Esta especie, se ha convertido en un ícono de la Península debido a que utiliza todos los humedales costeros del área para alimentarse, cortejarse, reproducirse e invernar; además, anida en los humedales de Ría Lagartos y de Los Petenes.

Phoenicopterus ruber es una especie muy sociable y de hábitos gregarios, esto quiere decir que pasa toda su vida y realiza todas sus actividades en grupo, los cuales pueden ser estar formados por aproximadamente mil individuos o más; a pesar de convivir en grupo, los flamencos son aves que comparten su vida con una única pareja.

Su característica más atractiva, además de su cuello largo y sus patas extensas y delgadas, es el color rosa brillante que posee su plumaje, el cual contrasta con la vegetación costera en la que habitan. Sin embargo, los flamencos no nacen del huevo siendo rosas; cuando son jóvenes, su coloración va de blanco a grisáceo y a medida que crecen van obteniendo el color rosa gracias a su alimentación. Se alimentan principalmente de algas, plancton y crustáceos pequeños, entre los que se encuentra Artemia salina, un crustáceo diminutoque contiene una sustancia llamada beta caroteno, el cual es almacenado en las plumas de los flamencos y les brinda ese característico color rosa a rojizo.

El color rosa que tienen los flamencos en la Península de Yucatán, ha atraído la atención de cientos de turistas; recorrer los humedales para apreciar la belleza de estas aves es una de las actividades favoritas de los visitantes. Los lugares más visitados para realizar los avistamientos son la Ría Celestún y la Ría Lagartos, sin embargo, también se observan en Los Petenes, Sisal, Dzilam, Sian Ka’an, y otros humedales costeros; cabe señalar que son más abundantes en aquellos que pertenecen al estado de Yucatán.

Desafortunadamente, la actividad humana, la extensión urbana y la presencia de fauna feral, amenazan el hábitat de los flamencos y sus sitios de anidación. No obstante, los pobladores se han comprometido a conservar a esta bella especie que se ha convertido en un símbolo importante de su cultura y que gracias al turismo, deja una gran derrama económica en sus hogares.

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