Por: Marissa Sánchez
Para mejorar tu imagen no necesitas mucho dinero. Comienza por depurar tu clóset y notarás la diferencia. Está comprobado que sólo utilizamos 45% de la ropa y accesorios que guardamos en el clóset; así que, si eres team “No tengo qué ponerme”, te recomiendo que dejes de gastar en ropa que seguramente utilizarás un par de veces y mejor hagas un détox de clóset.
Lo que no ves, no lo usas. Tómate una mañana de sábado para descolgar y vaciar los lugares donde tengas tu ropa. ¡Te sorprenderá encontrar prendas que habías olvidado que tenías”.
Clasifica. Separa tus prendas en tres grupos y bajo estos criterios:
Si te cuesta trabajo desprenderte de las cosas, imagina a alguien más siendo feliz usando lo que tú sólo atesoras.
¿Estás segur@?
Mídete las prendas del grupo “Puede ser” y «Súper sí” frente a un espejo de cuerpo completo. Ya puesto, te será más sencillo hacer una segunda selección de prendas.
¡Manos a la obra!
Una vez que tengas la selección final de prendas, acomódalas de tal manera que te sea sencillo localizarlas en el clóset. Intenta darles un orden tipo “cápsula”; es decir, que armen un outfit que puedas usar en tu día a día.
Termina lo que empezaste
Si alguna de tus prendas necesita una compostura, ajuste o simplemente, lavarse y plancharse, hazlo. No esperes a que pase de moda y sácale provecho al máximo. Aplica lo mismo con tus zapatos y tenis, verás que siempre tendrás qué ponerte.
Inicia este 2024 con un détox de clóset y un servicio 100% personalizado del personal shopper –herramientas que te ayudarán a tener el clóset de tus sueños y proyectar la mejor versión de ti–. ¡Yo te ayudo!
Marissa Sánchez
Asesora de imagen
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